Raúl Trujillo, entrenador principal del equipo cubano de lucha grecorromana, ya piensa en los nuevos desafíos que traerá el 2024 para sus pupilos en un año de Juegos Olímpicos con sede en París, Francia, donde irán con metas ambiciosas.
Raúl Trujillo, entrenador principal del equipo cubano de lucha grecorromana, ya piensa en los nuevos desafíos que traerá el 2024 para sus pupilos en un año de Juegos Olímpicos con sede en París, Francia, donde irán con metas ambiciosas.