Por el presente y futuro de la vida en la Tierra

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La presencia del hombre en los diversos ecosistemas terrestres, las modificaciones que para su beneficio realiza en ellos y la explotación indiscriminada que ha hecho de los recursos que le regala la naturaleza, generaron los serios y preocupantes cambios en el clima global que hoy experimentamos.
Para enfrentar esa situación que atenta contra la supervivencia de la propia especie humana existen quienes trabajan diariamente desde los gobiernos, la ciencia, las organizaciones e instituciones y las comunidades, por un futuro seguro y sostenible en este planeta azul.
A ellos, los defensores del Medio Ambiente, se dedica cada 17 de julio con el fin de reconocer su compromiso y valiosa labor.
Msiones como las de gestionar y proteger los territorios y su biodiversidad; identificar, controlar y vigilar las especies endémicas o exóticas invasoras, sus hábitos, distribución, comportamiento y desarrollo, así como diseñar y poner en práctica estudios sobre la flora y la fauna, hablan de esa sensibilidad medioambiental que poseen.
La urbanización y la industrialización, con el impacto ambiental que trae la infraestructura de viales, edificios, sistemas para los desechos sólidos y líquidos, entre otros elementos, también ocupa sus agendas.
De ahí su función como asesores de las autoridades locales, empresarios, vecinos y población en sentido general; como supervisores de proyectos que garantizan el acceso seguro y responsable al medio natural, las producciones agropecuarias sustentables y la eliminación de fenómenos como la contaminación del aire y el agua, que dañan la salud de los seres vivos.
En Cuba los expertos de instituciones como las universidades y el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), defienden la filosofía ambientalista nacida con el triunfo de la Revolución y reflejada en la Constitución de la República. Razón por la que en la mayor de las Antillas la protección del entorno constituye una prioridad del Gobierno.
El Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida) es un ejemplo de esa voluntad de proteger los ecosistemas y su diversidad biológica, especialmente al hombre, con una visión de presente y de futuro.
Dentro de Tarea Vida los matanceros defensores del medio ambiente han logrado la restauración y protección de las dunas con la reubicación de construcciones, el vertimiento de arena, el emplazamiento de pasarelas y el rescate de la vegetación nativa, además de mantener la salud e higiene de las playas que, existentes tanto al norte como al sur de la provincia, se destinan a la actividad turística.
A ello se unen la construcción de canales y muros de contención para evitar penetraciones del mar e inundaciones en áreas residenciales o de cultivos; la instalación de plantas potabilizadoras en regiones donde la intrusión salina incide en la calidad del agua de consumo; la protección de la barrera coralina de Maya; la restauración de las zonas de manglar; la implementación de sistemas de riego con agua de reúso en hoteles de Varadero y la sustitución de los equipos que contienen gases agotadores de la capa de ozono, entre otras tareas.
Paralelamente se trabaja en proyectos como ECOVALOR y BIOMAS-CUBA, que con financiamiento internacional generan beneficios ambientales en la Isla al estudiar la valoración económica de los bienes y servicios de las áreas protegidas, el primero. Y el segundo, nacido en la Estación Experimental de Pastos y Forrajes Indio Hatuey, del municipio de Perico, desarrolla alternativas para la obtención de energía a partir de la biomasa y que esas acciones sean compatibles con la seguridad alimentaria.
Otro de los colectivos que se destaca en Matanzas por la defensa del medio ambiente es el Observatorio Ambiental COSTATENAS, que lidera el Doctor en Ciencias Geográficas Alfredo Cabrera Hernández, con un fin específico, la investigación y gestión de la zona costera del norte de la provincia.
Así se han integrado en unos y otros proyectos ingenieros, biólogos, geógrafos, especialistas de Salud Pública, en Ciencias Sociales, educadores, meteorólogos, historiadores, campesinos, obreros industriales, pescadores, trabajadores del Turismo, pioneros, estudiantes, amas de casa y vecinos de las diversas comunidades, conscientes del peligro a que nos enfrentamos si no luchamos por una convivencia amigable con el medio ambiente.