¡Hay esperanza!
La selección que representa a la mayor de las Antillas en el Clásico Mundial de Béisbol 2023, chocará contra Panamá esta noche a las 11:00 pm hora de Cuba, juego por el que pasan todas las esperanzas de los cubanos para avanzar a los cuartos de final.
En esta edición el equipo cubano asistió por primera con un conjunto integrado por jugadores activos en los campeonatos nacionales y jugadores no federados con participación en ligas del Caribe o que pertenecen a organizaciones de las Grandes Ligas, además de aquellos contratados en Japón.
Desde el primer día se esperaba un torneo donde los peloteros le devolvieran la alegría a la afición cubana, ya era mucho tiempo teniendo malos resultados en competencias internacionales; pero una derrota frente a la bestia negra de Cuba, Holanda, y otra contra Italia, apagaron las esperanzas de los cubanos, fue inesperado y rompió la mayoría de los pronósticos, excepto por el picheo que sí se ha comportado a la altura del Clásico.
Tras las dos primeras derrotas, según el horario de Cuba en la madrugada del 10 de marzo, ocurrió un resurgir de los bates antillanos que le propinaron 21 Hits y 13 carreras a su rival de turno, Panamá, seguidamente como parte del grupo A, Taipéi de China y los panameños vencieron a Italia en sus respectivos duelos, así como Taipéi derrotó a Holanda en el choque ocurrido al amanecer de hoy en Cuba.
Para cerrar la actividad en el grupo A faltan los duelos de Cuba vs Taipéi, e Italia vs Holanda. El combinado cubano tiene vida, pero todas depende de una victoria de carácter obligatorio frente a los taipeyanos.
También resta el encuentro entre Holanda e Italia, donde lo más conveniente para Cuba sería una victoria de Países Bajos, así la selección caribeña quedaría en un triple empate con Panamá y Taipéi de China, conjuntos que derrotaron en los duelos particulares, de ganar Italia habría un quíntuple empate, también con esperanzas para Cuba, aunque sería más complicado. Lo más importante para los nuestros es vencer hoy a Taipéi sí o sí, después a esperar. ¡Hay esperanza!
