Gabriel Casuso Roque: un héroe de la Medicina y la independencia cubana

Tuvo la mayor de las Antillas en Gabriel Casuso Roque a uno de sus más fervientes defensores y estudiosos, venerado no solo por sus múltiples aportes a los campos de la Ginecología y Obstetricia cubanas, sino también por su pertinaz bregar por la causa independentista de la Isla.
Nacido el 6 de febrero de 1850 en Guamutas, provincia de Matanzas, destacó desde temprana edad por su sólida formación académica, al graduarse de bachiller en artes en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana en 1867 y, posteriormente, en la Facultad de Medicina de la casa de altos estudios capitalina.
Una vez arrancada la gesta emancipadora de Céspedes interrumpió sus estudios para unirse a la expedición del general Rafael de Quesada y Loynaz y combatir en el Ejército Libertador en 1869; sin embargo, poco tiempo después fue hecho prisionero en grave estado de salud, de ahí que fuera deportado hacia España, donde logró recuperarse y continuar su formación médica, tanto en Madrid como en París, donde se especializó en Cirugía y Ginecología.
Concluida la Guerra de los Diez Años regresó a su tierra natal, en la que materializó una prolífica carrera en la Cirugía y, en especial, en la Ginecología y la Obstetricia, áreas que grabaron para siempre su nombre en la historia médica nacional. No solo introdujo en la Isla la antisepsia y contribuyó a reducir la mortalidad posquirúrgica y por fiebre puerperal, sino que, además, sobresalió como uno de los pocos galenos que en aquel entonces fue capaz de realizar arriesgadas intervenciones quirúrgicas abdominales.
Asimismo, en la urbe capitalina estableció, junto al también doctor Ramón Claudio Delgado Amestoy, un servicio de Ginecología en el Hospital de Higiene de La Habana y la primera clínica ginecológica privada del país, instalaciones reconocidas por la calidad y entereza de sus servicios médicos y que lo posicionaron como un absoluto referente en el campo de la Ginecología nacional.
Además de su brillante labor médica, Casuso Roque tuvo una destacada trayectoria docente y política. Desde sus inicios como catedrático auxiliar en la Facultad de Medicina, hasta su elección como Decano y posteriormente como Rector de la Universidad de La Habana, concejal en el Ayuntamiento y Secretario de Agricultura, Industria y Comercio, su compromiso con la formación de nuevos profesionales y el desarrollo integral del país fue innegable.
Tras una vida dedicada al servicio de la Medicina y la patria, Gabriel Casuso Roque falleció el 17 de mayo de 1923, dejando un legado imborrable en la historia de la medicina antillana y en el desarrollo de la educación superior en la nación. Su compromiso con la excelencia académica y su incansable labor en beneficio de la salud de sus conciudadanos lo convierten en una de las más cimeras figuras de la Medicina cubana del siglo XIX y principios del XX.