Eliseo Abreu: versos e historias de quebrantos y emancipación
“Aprecio la honestidad y aborrezco la mentira, que es la causa de todos los males”, apuntó el escritor Eliseo Abreu Hernández, uno de los literatos más laureados de esta provincia, en entrevista para este medio.
Su galardón más reciente fue el Premio de Poesía José Jacinto Milanés 2024, convocado por Filial de la Asociación de Escritores de la UNEAC en la ciudad de Matanzas, con la obra “Las almas de Fátima”.
Eliseo vive en Jovellanos y no cree en la fatalidad geográfica. Sus versos emergen desde el centro de la tierra matancera, captando “retazos de la vida diaria para convertirlos en poemas”, como él mismo confiesa.
Y también en su prosa, porque Eliseo es un gran narrador, que aprovecha su entorno y realidad, desde la visión de una ciudad del interior del país, para incorporarlos al contenido de sus obras.
Ese sentir particular, volcado en cientos de cuartillas, ha sido reconocido y premiado en importantes certámenes literarios, al entretejer sentimientos donde aparecen desgarraduras y vientos de emancipación.
Entonces, le pregunto: ¿cuándo considera que su escritura comienza a expresar profundos conceptos éticos?
“Desde que dejé de balbucear estrofas al azar, inicié la forja de mi propio idioma poético, fue una evolución total hacia una perspectiva personal más enriquecedora.
“Me incorporé alrededor de 1990 al taller literario Placido Valdés, de la casa de la cultura Manuel Navarro Luna, el mismo que actualmente encabezo”.
No obstante vivir lejos de la Ciudad de Ríos y Puentes, este incansable jovellanense, nacido en 1961, participa asiduamente en actividades de la UNEAC y del Centro provincial del Libro y la Literatura.
“Te sueño en el estremecimiento del tambor coronada de oro legítimo…” (Del poema Reina danzante)
Ante el sugerente título “Las almas de Fátima”, le pregunto intrigada: ¿qué encontrará el lector en este poemario?
“La existencia de mujeres, que de tan cotidianas se hacen invisibles, tan terribles, que muchas causan horror”.
Lo cual corrobora el veredicto del jurado cuando precisó que “son como historias de vida que testimonian cosas que ha visto: el maltrato sicológico, el maltrato físico que puede llegar a la violación, la discriminación por diversos motivos, la prostitución, entre otras dolorosas circunstancias”.
Ha alcanzado además del reciente Premio de Poesía José Jancito Milanés, el Digdora Alonso y el América Bobia, en Matanzas; el Ciudad del Che, en Villa Clara; el Fundación de la ciudad de Gerona, en Isla de la Juventud; finalista en Poesía en el Concurso la Gaceta de Cuba, entre otros, más de carácter internacional el Premio de la Asociación de Mayores de la Universidad de la Laguna, en Canarias,
Entre sus publicaciones está el libro “A golpes de jazz”, de ediciones Matanzas y sus escritos aparecen en plaquetes y antologías en Cuba, México, España, Perú, Estados Unidos y Chile.
Es Licenciado en Educación Física y Maestro de Kárate-Do estilo Shotokan, 3er. dan por la escuela internacional Neko -Ashi-Kai-Kan, de Venezuela.
Le digo: Observo que su verso y prosa fluyen a espacios más elevados. ¿Influye en ello su alineación a las artes marciales?.
“Sí, las artes marciales y sus enseñanzas ya tienen un espacio dentro de mí, si podemos vencer a enemigos que no podemos ver como la ira, el miedo, el chisme, la envidia, el egoísmo, dígase presunción, arrogancia , hipocresía, lujuria, mentira, codicia más el engaño, estarás listo para luchar contra un enemigo, que sí se puede ver.”
¿Crees que lo espiritual prevalecerá sobre las exigencias materiales en este siglo XXI?
El poeta y narrador Eliseo Abreu declara:
“Eso todavía está por verse. Si prevaleciera lo material sobre lo espiritual estaríamos destruidos como especie”.
Poemas de Eliseo Abreu Hernández
REINA DANZANTE
Te sueño en el estremecimiento del tambor
coronada de oro legítimo.
Pequeña, frágil
Poderosa entre los vuelos de tu falda.
Secretos ritmos de orishas
trasmutando en tu cuerpo.
Miel, entre dorados y amarillos.
No hay miedo en el baile, ni temor.
A vuelto en tu risa.
Miles de rosas desojándose a tus pies.
Los tambores callan, despierto con sed.