
El
Festival Aniversario 40 de Ediciones Vigía escenificó la presentacion de los libros arte:
«27 Relámpagos», de la cubana Soleida Ríos y
«Poemas sin lilas«, de la argentina Marisa Martinez Pérsico, en la sede de ese sello, cercano a la ribera del río San Juan, en la ciudad de Matanzas.
Bajo el arpegio de una guitarra, Agustina Ponce, directora de Vigía, convocó a los intelectuales Leymen Pérez y Margarita Mateo, Premio Nacional de Literatura, a promover los títulos, editados por Laura Ruiz, con diseño de Marialva Ríos, el de Soleida y por Agustina y Pablo G. Leonart, sumada a la visión plástica de Helga Montalván, el de Marisa.

Al intervenir, Leymen resaltó la integridad de una antología devenida expansión poética, en rasgo que define los trazos étnicos de la identidad social de Soleida Ríos.

La selección, dijo, revitaliza poemas que en la visión de la relevante poetisa, resultan registros de una energía, convertida en relámpagos, cuya fuerza se combina de poema en poema durante un tiempo sorprendente.
Soleida expresó la riqueza espiritual que le aporta la escritura con giros hacia el propio reconocimiento y leyó, entre otros, el poema «Último rezo para los ojos del traidor», escrito en 1986, el más antiguo de esa colección.
Al presentar el cuaderno de la escritora argentina, Magui Mateo destacó la comunión de géneros, evidente en su despliegue literario desde el ejercicio de la poesia a la narración, en un amplio abanico temático.
«Rompe cercas del idioma», apuntó, y así llega la poesía de Marisa Martinez «a alimentar la llama del candil».
La concurrida sala de ediciones Vigía supo que la argentina lleva permanente un busto de Martí en su equipaje.
Al leer sus poemas emergió el sentir de los cuerpos, en una humanización que evoca el trabajo, el esfuerzo, las tristezas o ternuras, que llegan para perpetuar un viaje hacia lo más íntimo.
Presentes los directores del Centro provincial del Libro y la Literatura, Efrahim Pérez Izquierdo y del Centro de Promoción José Jacinto Milanés, Frank Santana, acompañados por escritores laureados de la provincia y el país.
Finalmente las autoras autografiaron sus libros y recibieron obsequios manufacturados por el colectivo de la institución, en complicidad creativa, apreciada al elaborar dos joyas poéticas y artísticas dentro de la bella colección de libros arte, en la fecha especial de homenaje al aniversario 40 de la famosa editorial yumurina.