Un jardín para los niños (+fotos)
El pasado Día de la Infancia, el Jardín Pelusín del Monte de Matanzas se transformó en un paraíso de risas y alegría.
La celebración fue un rotundo éxito, lleno de momentos mágicos y risas contagiosas.
El payaso Pirlo, con su nariz roja y su traje a rayas, fue el alma de la fiesta. Sus chistes y trucos mantuvieron a los niños riendo a carcajadas. Cada broma, cada acto de magia, añadió un toque de felicidad y alegría a los infantes.
Pero la diversión no terminó ahí. El Mago Alain, con su capa brillante y su varita mágica, dejó a todos boquiabiertos con sus impresionantes números de ilusión. Los niños miraban con asombro mientras manejaba la espada y desaparecía objetos del público.
La celebración del Día de la Infancia en el Jardín Pelusín del Monte fue un momento lleno de risas, asombro y alegría. Fue un recordatorio de la importancia de celebrar estos momentos.