PEDRO BETANCOURT-.Como parte del programa de la agricultura urbana, suburbana y familiar, desde este municipio se fomenta la producción de hortalizas y vegetales a través de los organopónicos en un contexto donde urgen la soberanía alimentaria y el desarrollo local.
PEDRO BETANCOURT-.Como parte del programa de la agricultura urbana, suburbana y familiar, desde este municipio se fomenta la producción de hortalizas y vegetales a través de los organopónicos en un contexto donde urgen la soberanía alimentaria y el desarrollo local.
Destaca entre ellos el organopónico Cuba Libre perteneciente al barrio en transformación homónimo que, con un total de 56 canteros y cultivos, en su mayoría de ciclo corto, goza de una amplia demanda y aceptación por la calidad de sus producciones. Al respecto nos comentan sus obreros agrícolas Julián Crespo Chamizo y Reinol Armas Armas, respectivamente.
Asimismo Pedro Enrique Alfonso Santander, jefe de colectivo del organopónico Arratia de esta localidad significó la importancia de esta entidad por la diversidad de alimentos que propone para satisfacer la demanda de los centros priorizados y abastecer a los ciudadanos betancoureños.
Surgido en 1987, cuando el entonces Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, Raúl Castro Ruz exhortó a la generalización de los organopónicos como impulsores de la producción local de alimentos en ciudades y poblados, el programa de la agricultura urbana, suburbana y familiar deviene una alternativa para potenciar la soberanía productiva, resiliencia, sostenibilidad y desarrollo local sobre la base de prácticas agroecológicas y el empleo de recursos endógenos.