Tierras agrícolas: uso eficiente para el desarrollo (+audios)

PEDRO BETANCOURT.- El uso eficiente de las tierras agrícolas se ha convertido, sin dudas, en una prioridad estratégica para fortalecer la producción de alimentos y solventar los desafíos que ha de enfrentar la mayor de las Antillas en el complejo escenario económico en que esta se desenvuelve.
Este esfuerzo se evidencia en territorios como Pedro Betancourt, reconocido por sus indicadores positivos en la producción de arroz, leche, huevos, frutas, viandas, tabaco y de cultivos rústicos como la malanga, el plátano, el boniato y la yuca, entre otros.
La implementación de un modelo de autosuficiencia basado en la planificación anticipada, la agroecología y la diversificación productiva corrobora la concreción de estos resultados. Así lo expresó a nuestra emisora Jany Delgado Saiz, directora agropecuaria de la Empresa Agroindustrial municipal.
De igual forma, las campañas productivas, la innovación técnica y la participación comunitaria emergen como derroteros esenciales para alcanzar el autoabastecimiento local. Al respecto, Delgado Saiz significó:
En medio del complejo escenario socioeconómico que enfrenta la Isla, la agroecología se posiciona como una solución sostenible para incrementar la producción agrícola, proteger los recursos naturales. Así lo refirió a nuestra emisora Juan Carlos Cartaya Souza, propietario de la finca Santa Catalina, perteneciente a la Cooperativa de Crédito y Servicios Juan de Mata Reyes, de este municipio.
Por su parte, el obrero agrícola Julián Crespo Chamizo, del organopónico Cuba Libre subrayó los aciertos de estos enclaves en cuanto a la soberanía alimentaria y sus ingentes contribuciones al desarrollo local, siempre en correspondencia con las directrices del programa de la agricultura urbana, suburbana y familiar.
Cabe destacar en esta instancia la participación de los estudiantes de la escuela politécnica Leonor Pérez Cabrera, cuyo plantel desde las especialidades afines promueve la ejecución de labores agrícolas como la siembra y el mantenimiento de cultivos, rejuvenece la fuerza laboral y fomenta en las nuevas generaciones el interés por carreras de corte agropecuario.
Con la combinación de políticas estatales, estrategias diversificadas y la participación activa de su comunidad agrícola, Pedro Betancourt se posiciona como un referente en la búsqueda de la soberanía alimentaria. Este enfoque ejemplifica cómo la colaboración entre tradición, innovación y sostenibilidad puede sentar las bases para un desarrollo autosuficiente y replicable en otras regiones del país.