Interioridades de la reconexión del SEN (+fotos y video)

La suerte de contar con amistades en el sector eléctrico, como el profesor José Ricardo Muñoz Morgado, especialista en sistemas de transmisión e integrante de la Comisión de Certificación Internacional para operadores de subestaciones eléctricas, nos permite conocer casi diariamente detalles y tensiones del sector.
Hoy -naturalmente con su aprobación-, les narramos el momento que se vivió antes de las 2 y 44 de la tarde en la subestación de 220 kv del poblado cienfueguero de Canta Rana.
Resulta que los especialistas del Despacho Nacional de Carga deciden -porque era el punto exacto- cerrar el Sistema Electroenergético Nacional (SEN) en la subestación que en ese momento operaban los jóvenes Osmany Rieche Quintana e Iván Bermúdez García. Puede usted imaginar el intercambio de miradas entre ellos.
Normalmente es una operación habitual para los especialistas, pero…, tras casi cuatro días de interrumpido el SEN, operar el interruptor en el momento preciso y no errar, ya era un reto ante la expectativa nacional.
Valga la aclaración que durante la desconexion del SEN, el pasado viernes, también Osmany e Iván, trabajaban juntos y ahora, responsabilizarse con la reconexión les generaba un sentimiento difícil de expresar.
Con las orientaciones del Despacho Nacional de Carga (DNC) y la vista fija en el sincronoscopio, una suerte de equipo que muestra el momento ideal para accionar el interruptor, Osmany e Iván chequeaban voltaje, frecuencia y otros parámetros para accionar el interruptor en el momento exacto de sincronía.
De más esta decir que aún con los parámetros en regla, existe un elemento esencial, y es saber operar el interruptor con total concentración y sangre fría, décimas de segundos antes de que coincida la lectura del sincronoscopio.
Y así fue: a las 2 y 44, una mano firme y joven conectó occidente con el oriente en un dúo que, quizás mañana, porque hoy continúan su trabajo, puedan festejar una victoria de muchos y para todos.
Claro, desde el DNC fueron felicitados y con razón, porque jóvenes como Osmany e Iván, consagraron el esfuerzo de miles de trabajadores del sector eléctrico con mano firme y serenidad a toda prueba.