8 de septiembre de 2024

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La agroecología es el camino (+audio)

La ciencia y la innovación son las herramientas fundamentales utilizadas por los especialistas de Indio Hatuey para lograr la producción local de alimentos, la sustitución de importaciones y el ahorro de recursos financieros.

PERICO.- La ciencia y la innovación son las herramientas fundamentales utilizadas por los especialistas de la Estación Experimental Indio Hatuey, de la Universidad de Matanzas, para lograr la producción local de alimentos, la sustitución de importaciones y el ahorro de recursos financieros.

Lo anterior lo destacó Yuván Contino Esquijerrosa, investigador de la institución científica ubicada en este matancero municipio.

“Aquí ya logramos la cosecha de productos como la papa y el arroz a partir de principios ecológicos y el uso de bio-insumos como el IH-PLUS”.

¿Qué significa IH-PLUS?

«IH, hace referencia a las siglas Indio Hatuey, nombre de nuestro centro y PLUS porque es un producto natural elaborado a partir de la fermentación del manto forestal de un monte virgen que conserva su materia orgánica. Por ejemplo, vamos a la Ciénaga de Zapata, lugar que tenemos identificado en la provincia para la colecta de hojarasca. Es una zona que se encuentra protegida, sin influencia de ríos que arrastran el material, salinas que contaminan, ni la presencia de actividad humana que deteriora el lugar con desechos sólidos o líquidos».

¿Qué otros elementos resultan de interés para colectar?

«Las colonias de hongos y bacterias, algo que también representa una riqueza, pues permite que se degrade la lignina y la celulosa a nivel del bosque. Esos polímeros naturales que constituyen las plantas, tienen una fuerte textura y cuando se descomponen la incorporan al suelo. Por eso con el IH-PLUS hacemos una importante contribución medioambiental al utilizar racionalmente los residuos de ecosistemas boscosos».

¿Sólo elementos extraídos del bosque conforman el IH-PLUS?

«No. Durante el proceso de fermentación de esa hojarasca, adicionamos una fuente de carbono, como la paja de arroz; añadimos melaza o miel de pulga resultante de la fabricación de azúcar de caña; y restos de subproductos como el suero de la leche para potenciar la presencia de lacto-bacilos, esenciales en la fermentación. Así obtenemos una ‘madre’ o masa sólida, derivada de la primera fermentación, después la madre líquida y por último, la tercera fermentación de donde extraemos el precipitado o fertilizante que en forma de lluvia se aplica a los cultivos o el suelo».

¿Qué beneficios le reporta el IH-PLUS a las siembras y a la tierra de cultivo?

«Esto tiene un efecto muy favorable sobre el control de plagas, enfermedades y particularmente en la calidad del suelo, al garantizarle el equilibrio nutricional. Pero este producto natural es igual de valioso en la cría de animales porque incorporamos microorganismos de tipo benéfico que le proporcionan mejoras en los procesos de digestión y asimilación de alimentos. Ello influye en el aprovechamiento óptimo de las dietas. Por todo eso IH-PLUS potencia el área agrícola, el área ganadera y sobre todo preserva el medio ambiente.

«De ahí que lo pongamos a disposición del sistema agropecuario de Cuba, porque la agroecología es el camino seguro para la sostenibilidad alimentaria en medio de las actuales condiciones de cambio climático», enfatizó Contino Esquijerrosa.

 

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