Servicios necrológicos: ¿qué se cobrará y qué no?
En la vox populi un tema ha emergido últimamente: el posible cobro de algunos servicios necrológicos, esos que siempre se ofrecían de forma gratuita y que, a partir del reordenamiento económico, van a sufrir ciertas modificaciones. La necesidad de liberar al Estado de algunos gastos y de elevar la eficiencia de determinados servicios son las razones fundamentales por las cuales en varias provincias cubanas ya se comenzó con el rembolso monetario por concepto del pago de determinadas actividades asociadas a las defunciones.
En declaraciones a Escambray, Yoel Aquiles Martínez, director de la Unidad Provincial de Servicios Necrológicos de Sancti Spíritus, creada recientemente, explicó: “Como parte del reordenamiento desaparece la Dirección provincial de Servicios Comunales y surge esta nueva entidad, la cual atendería las 24 funerarias y capillas que existen en el territorio, además de la actividad asociada a las defunciones, velatorios y traslados de los fallecidos, excepto la de los cementerios que, aunque debería estar vinculada a nuestra entidad, todavía continúa bajo la dirección de Comunales en cada municipio”.
Entonces, ¿para qué queda Servicios Comunales?
Esa estructura se subordina directamente a los Gobiernos Municipales y se encargará de garantizar la recogida y el procesamiento de los desechos sólidos, la atención a las áreas verdes y la limpieza de calles y parques, además de todo lo relacionado con los enterramientos, exhumaciones y lo referido, en general, a los camposantos.
¿Es cierto que se cobrarán algunos servicios necrológicos?
Hasta hoy el Estado ha asumido los gastos de los servicios necrológicos, excepto algunos que se cobraron, aunque en menor cuantía, como es el caso de la cremación de cadáveres y el traslado de fallecidos hasta otras provincias, este último solo en un 50 por ciento. Pero ya se trabaja en la implementación del pago de algunas prestaciones, entre ellas, las relacionadas con los traslados de fallecidos entre municipios de una misma provincia. Un ejemplo es lo que sucede con los enterramientos de la zona de Tuinucú, los cuales tradicionalmente se hacen en Sancti Spíritus, que es otro municipio, en lugar de utilizar el cementerio de Zaza del Medio; de ser así, el familiar debe pagar por el traslado del cadáver hasta la cabecera provincial.
El otro cobro que se está proponiendo será por la velación en el domicilio, en ese caso la funeraria presta los servicios relacionados con el velatorio y la familia pagaría sobre la base de la tarifa de precios aprobada. Esta nueva variante ya se aplica en la capital del país, solo que en Sancti Spíritus está en proceso de aprobación y requiere la anuencia del Consejo de Gobierno.
¿Cuáles serán los servicios que el Estado garantizará gratuitamente?
Los que ha estado asumiendo hasta hoy, como la entrega de un ataúd, el traslado desde la casa o el hospital hasta la funeraria o capilla con la disposición del carro fúnebre, el combustible para esa actividad y el arreglo del cadáver, y dentro de estas prestaciones, las que se relacionan con el velatorio en el local habilitado como tal; pero si el familiar quiere otro tipo de servicio, como realizar el enterramiento en otro lugar, fuera del municipio o provincia, entonces se le cobraría por eso.
Como parte de esta nueva estructura, ¿se prevén servicios para que el cliente opte por el que desee?
Estamos previendo habilitar puntos de venta para ofertar el conocido guardarrestos, así como la venta de ánforas, con mejor diseño y calidad, para guardar las cenizas del fallecido en el crematorio. Asimismo, se ofrecerían otros tipos de ataúdes, de un mejor diseño, para quienes deseen y puedan adquirirlos, lo que no significa que el Estado deje de poner el que hasta hoy ha mantenido de forma gratuita.
Las ideas pueden ser muchas. Está el caso de la venta de flores finas, que en Taguasco, por ejemplo, ya se ofrecen para el servicio de coronas a precios diferenciados y, aunque hasta el momento el servicio de coronas, cojines y ramos corre a cargo de otra entidad, nosotros estaremos incursionando también en esta modalidad.
Nuestro propósito es que los servicios necrológicos poco a poco se vayan autofinanciando y con esos ingresos podamos mejorar los que quedan gratuitamente, donde se incluyen, además, las mejoras constructivas de las funerarias y capillas, así como el estado técnico de los carros, algo en lo que se ha venido trabajando, pero, por el grado de deterioro que presentaban y el tiempo de explotación, ha sido imposible realizar esta actividad de manera eficiente.
El país nos entregó dos nuevos carros fúnebres que hemos designado para el servicio de traslados interprovinciales, carros valorados en 1 800 000 pesos cada uno, son de procedencia china y se espera otra entrega de este tipo de medios a la provincia.
No obstante, esta ha sido siempre una actividad priorizada en cuanto a asignación de combustible, por tratarse de algo muy sensible, por tanto, hay que reconocer que el combustible no ha faltado para asegurar los servicios necrológicos y el ejemplo está en que todas las mañanas se habilitan los carros fúnebres y los dos que se destinan al traslado de ataúdes para los municipios.
Hay quienes cuestionan la demora del carro fúnebre para recoger el fallecido, ya sea en la morgue o en el hogar.
La Unidad Provincial de Servicios Necrológicos de Sancti Spíritus tiene hasta dos horas para realizar los traslados, solo que el carro no se presenta en los lugares hasta tanto no esté concluido el trámite de documentación legal, dígase certificado de defunción emitido por un médico o el de medicina legal, en caso que así sea, y el tiempo se cuenta a partir del momento en que la institución de Salud llama a la funeraria para solicitar el servicio.
Además, hay ocasiones en que el mismo carro que debe ir hasta la morgue puede estar recogiendo a un fallecido en el hogar, lo que retrasaría un poco el servicio de traslado, pero nunca se excede de las dos horas establecidas. Esta es una provincia con un alto grado de envejecimiento poblacional y se ha incrementado el número de muertes, al punto de que, en los últimos tiempos, de un promedio de 200 y más defunciones dentro de un mes, hoy estamos por encima de los 400 y por lo general el 50 por ciento de estas suceden entre viernes y domingo, lo que hace más compleja la actividad necrológica en el territorio.
(Por: Escambray)
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