Bajo la dirección magistral de Rubén Darío Salazar y con el diseño escenográfico de Zenén Calero, la compañía ha creado una propuesta escénica que fusiona poesía, música y danza, llevando a los espectadores en un viaje mágico por el universo del pequeño príncipe. La música de Raúl Valdés y la coreografía de Yadiel Durán dan vida a los versos de Espino en el escenario.
La presencia del poeta José Manuel Espino en la audiencia añadió una emoción palpable; la energía se podía cortar en el aire. Cuatro jóvenes actores entregaron alma y corazón sobre las tablas de tan querido teatro. En medio del maremágnum cotidiano, emprender este viaje por la historia de Saint-Exupéry es una búsqueda incansable de la felicidad, como la del propio Principito, aun sabiendo los retos y precios a pagar.
«Un rastro en las estrellas» no solo celebra la belleza de la poesía y el teatro, sino que también acerca a las nuevas generaciones a la riqueza literaria y artística del mundo, a través de creadores de Matanzas. Es un testimonio del talento y la creatividad de los artistas locales, y su presentación en el Teatro de las Estaciones es un acontecimiento que nadie debería perderse.
Rubén Darío Salazar ha adaptado previamente otros textos de José Manuel Espino, destacándose por su habilidad para transformar la poesía en experiencias teatrales únicas que conmueven y conectan profundamente con el público. Su colaboración constante con Espino y el equipo creativo del teatro ha dado lugar a espectáculos que son verdaderas joyas escénicas.

Esta obra es una invitación a seguir explorando y difundiendo el arte en cada rincón de Matanzas. Promover espectáculos como este en otros barrios y provincias no solo enriquecerá nuestra cultura, sino que también unirá a la comunidad en torno a la magia del teatro y la poesía.