Etecsa alerta: Que no te estafen con una recarga internacional

De acuerdo con la directiva, esa situación conlleva a ingresos que dejan de ser percibidos por la empresa, necesarios para la modernización y ampliación de nuestra infraestructura de telecomunicaciones y, al mismo tiempo, genera un estrés adicional a la red.
González Fernández agregó que Etecsa ha recibido «quejas de clientes que, aparentemente, fueron beneficiados por una recarga internacional, pero no disfrutan de todos los beneficios que la mayoría ofrece, como el acceso a determinadas plataformas sin consumo de datos o internet ilimitado».
Ello se debe a que si no se recibe la recarga internacional de los distribuidores oficiales de Etecsa —los cuales pueden ser consultados en su sitio web oficial—, «no es posible asegurar que el cliente obtenga un servicio legítimo y con respaldo legal», subraya González Fernández.
Para saber si la recarga es legítima, el proceso es muy sencillo: el SMS que usted recibirá en su teléfono tiene que provenir del remitente CUBACEL, así en mayúsculas, un mensaje al que, además, no es posible responder. Si proviene de un número privado, ya sea cubano o extranjero, es porque forma parte del fraude aquí denunciado.
Por otro lado, las ofertas no oficiales, aunque parezcan más económicas, conllevan riesgos de fraude, alertó la Directora Central de Relaciones Institucionales, quien agregó que «solo los canales oficiales son capaces de garantizar la protección de los datos personales y financieros de los clientes, así como respaldo y soporte ante algún problema técnico».
«Ofrecer a nuestros clientes servicios confiables y seguros es una de nuestras prioridades, pero para lograrlo, necesitamos la colaboración de todos en el uso de las vías oficiales», sentenció.
Aunque desde el operador se trabaja para mitigar y eliminar este fenómeno, aún persiste, por lo que es indispensable que en los tiempos actuales, las personas ganen en cultura de seguridad digital. Estar informado por los canales oficiales de la Empresa es el primer paso que cualquier cliente puede dar para que su recarga internacional sea totalmente legítima.
- Juventud Rebelde