Náufrago (+audio)

Carlos Francisco Rodríguez González nunca pensó en competir con Santiago, el protagonista de la novela El viejo y el Mar, cuando el jueves 16 del mes de febrero último echó su embarcación rústica al mar. Cerca de la bahía de La Habana comenzó su pesca, que se complicaría con la casi captura de una aguja, corrientes marinas y otros sucesos que parecen copiados del texto de Ernest Hemingway.
Ocho días después de la aventura arribó a la bahía de Matanzas en el buque que le salvó la vida. A pesar de la atención médica recibida en el navío fue remitido al hospital, al que llegó todavía con algunos síntomas de deshidratación y ligeras quemaduras de sol, que afortunadamente para él en esos días estuvo oculto tras las nubes de un frente frío.
Su experiencia y supongo que bastante suerte le acompañaron para poder sobrevivir la aventura, aunque esta queda como un ejemplo de los peligros que implica la navegación en embarcaciones poco seguras, como esas que a diario vemos en la rada yumurina.
- Foto de Ana Cristina Rodríguez