Desde que una humilde casa de Encrucijada, en la otrora provincia de Las Villas viera nacer a Jesús Menéndez Larrondo el 14 de diciembre de 1911, la ancestral sangre mambisa que corría por sus venas lo convirtió en un fiel defensor de los oprimidos de la clase obrera y enemigo ferviente del antiimperialismo.