Angola despide con cariño a Díaz-Canel
LUANDA, Angola.- Tras dos intensísimas jornadas, en las que compartió con centenares de angolanos y cubanos, el primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, fue despedido en el Palacio Presidencial de Angola por su colega João Manuel Gonçalves Lourenço.
Los mandatarios tuvieron un encuentro -un «tête à tête», como se dice- durante una ceremonia en la que también participaron las delegaciones oficiales que interactuaron en esta visita de Estado.
La misión cubana estuvo integrada por el miembro del Buró Político y canciller, Bruno Rodríguez Parrilla; el titular de Salud Pública, José Angel Portal Miranda; la miembro del Consejo de Estado y rectora de la Universidad de La Habana, Miriam Nicado García; el jefe del Departamento de Relaciones Exteriores del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Emilio Lozada García; la viceministra primera de Comercio Exterior, Ana Teresita González Fraga, y la vice titular del Minrex Anayansi Rodríguez Camejo, entre otros directivos.
Díaz-Canel, quien estuvo acompañado por su esposa, Lis Cuesta Peraza, llegó a Luanda en la tarde del domingo, momento en el que inició una visita de dos días que incluyó, primeramente, un encuentro con una representación de los más de 2 000 cubanos y cubanas que cooperan en este país en sectores como la salud, la educación y la construcción, entre otras áreas.
Durante las conversaciones oficiales, se ratificó la voluntad de ambos países de llevar los nexos económicos y comerciales al nivel de las excelentes relaciones políticas y diplomáticas que sostienen, y se firmaron acuerdos en áreas como la regulación de medicamentos y equipos médicos, el turismo y el vínculo entre las zonas especiales de desarrollo Mariel y Luanda-Bengo.
El presidente João Lourenço subrayó que Angola tiene en alto valor las relaciones con Cuba y es propósito de su gobierno profundizar y consolidar los lazos de amistad y cooperación, y consideró que la visita de Díaz-Canel a Luanda constituye un paso importante en la materialización de estos objetivos.
El Jefe de Estado caribeño también asistió a una sesión solemne convocada para la ocasión por la Asamblea Nacional. La presidenta del parlamento angolano, Carolina Cerqueira, enfatizó en los lazos históricos que unen a Angola y Cuba y agradeció a la Mayor de las Antillas por su contribución a la independencia de Angola, de Namibia y al fin del apartheid.
Díaz-Canel sostuvo encuentros con representantes del movimiento de solidaridad con Cuba y de la comunidad de cubanos residentes. También rindió tributo al comandante Raúl Díaz-Argüelles en la tumba que aún se conserva en el cementerio Alto de las Cruces, donde los restos del héroe antillano fueron cuidados y abrigados por el gobierno y el pueblo angolano hasta su traslado a la patria.
Emotiva fue la visita a la escuela Angola-Cuba, en el municipio de Cazenga, una construcción tipo Sandino levantada décadas atrás por constructores cubanos con materiales traídos desde Cuba y donde hasta las lozas de granito de sus pisos son las típicas de los centenares de escuelas en el campo que se construyeron en el Archipiélago desde finales de los años 60 en adelante.
En Cazenga, uno de los siete municipios de Luanda, vive más de un millón y medio de personas. Es una zona pobre. Su gente es muy agradecida, como los centenares y centenares de lugareños, tal vez miles, que se agolparon a lo largo de la avenida polvorienta que lleva de la autopista hasta el centro educacional, para saludar a Díaz-Canel y el resto de la delegación cubana.
El Jefe de Estado también sostuvo un encuentro con el personal de la sede diplomática de Cuba aquí, y sus familias, ante de abandonar Luanda rumbo a Johannesburgo, Sudáfrica, para participar en la Cumbre de los Brics, a la que la Mayor de las Antillas ha sido invitada como Presidenta pro tempore del Grupo 77 + China.