Miércoles de poesía abre puertas nuevamente a la poesía joven (+videos)
Pablo G Lleonart fue el invitado al espacio Miércoles de poesía que auspicia Ediciones Matanzas. El autor, licenciado en Periodismo, miembro de la Dirección Nacional de la AHS y egresado del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso, compartió con los presentes en la casa social de la UNEAC poemas de sus dos libros publicados y del que próximamente entrará en proceso de edición.
De Habitantes de Marte, Premio Aldabón de Poesía, el joven leyó textos que ya son conocidos entre los lectores matanceros como 1995, Ballenas e Información nutricional.
1995
I
1995
es un año que nadie recuerda
(al menos que hayas nacido en él)
No es un año tan significativo
como
1492
1789
1917
que todo el mundo conoce
o como
1868,
1895,
1959
que todo cubano memoriza
1995
a pesar de celebrarse
el centenario de la muerte de José Martí
no es tan importante
como 1953
IX
1995
comenzó un domingo
y se declaró
Año de las Naciones Unidas para la tolerancia
en 1995 mis padres llevaban cinco años
de tolerancia al Período Especial
y mis abuelos treinta y tres al bloqueo económico y financiero
en 1995
muere entre desconocidos, casi olvidado, el poeta Marimón
Julio Girona
exhibe sus mujeres en La Habana
y Murakami
publica Crónica del pájaro que da cuerda al mundo
IX
1995
no es un año de grandes acontecimientos
Cuba fomentó la inversión extranjera
mientras Lars von Trier definía su Dogma
como si hablara del pan nuestro de cada día
1995
dentro de cien años
será solo una fecha en un calendario antiguo
cuando los hombres todavía hablaban
y hacían de la calistenia un ejercicio cotidiano
V
1995
se me parece a una pintura de esas
en que Girona decía
pinto mujeres que no existen
1995
le escribo un poema
a un año que no recuerdo
BALLENAS
I
en mi cama
cada mañana me levanto con la sensación de que soy el capitán Ahab
con las ganas furiosas de domesticar una ballena, la más grande,
la mejor de todas
en la parada
me percato que soy solo un pez más dentro de todo el oleaje
II
busco a Moby Dick no para matarlo,
mis manos apenas lo atacarán con un arpón
que vale un peso moneda nacional,
pero Moby nos obvia
sigue de largo, como si fuésemos nada
nosotros que parecemos
pececitos esperando que su gran boca nos devore
INFORMACIÓN NUTRICIONAL
¿cuánto te alimenta un poema?
una lata de refresco de doce pesos
según el Nutrition Facts
etiquetado a un costado:
-40g de azúcar
-202 kcal
-un 6% de Vitamina A, C, B5, B6, E, B3
un libro de poemas de doce pesos
-3268 palabras
-cuarenta poemas
-1077 líneas 6% intertextual de William Blake, e. e. cummings
y Federico García Lorca
cuánto pesa el verso
en el estómago
cuánto nutre el hambre al alma
un poema no resuelve tus problemas
ni de alcoba ni oficina
un poema es 100% carne roja
la palabra prohibida
el silencio constante que te llena
brother que te llena
hasta reventar
En El rumor de un lejano galope de caballos, Premio Mangle rojo de poesía, Lleonart hace referencia a momentos difíciles que ha vivido el pueblo cubano desde los años noventa hasta la actualidad y convida a una apuesta por la esperanza y la vida, más allá de los grises que se puedan tornar determinadas situaciones en el transcurso de la misma.
De ese cuaderno que se presentará este año en las Ferias del Libro en La Habana y Matanzas, dio a conocer textos como Amoníaco, Durero, Repeticiones y Apuesta.
DEADBALL
I
Peter Handke el miedo del portero ante el penalti no es muy diferente al miedo del pitcher ante el jonrón/pero nosotros no somos ni porteros ni pitchers/ nos hemos acostumbrado a pararnos en home con el bate en la mano aun sabiendo que nos van a golpear/ y ahí estamos con los pies en la tierra sin movernos/ defender el home (soportar el dolor) se ha convertido en deporte nacional
II
le pregunto a las personas por estos días/ a los que vivieron ya estos días de incertidumbre/ como sopesar los golpes que nos van dando a cada hora/ ellos me recomiendan entrenarme con César Vallejo/ que el boxeador peruano, sin ser de aquí, es experto en golpes/ y con él voy puliendo los nudillos frente al saco de yute de sus heraldos negros/ tengo que reconocer usando algo parecido a tus mismas palabras, Billy Collins, lo malo de la poesía es que anima a leer más poesía
III
César Vallejo nació un día en que Dios estuvo enfermo/ y desde entonces Dios no ha mejorado mucho/ yo tuve que nacer por las historias que me cuentan un día en que Dios estuvo en terapia intensiva, con suero citostático, ventilación artificial y dos infartos/ toda la electricidad del mundo estuvo el día que nací a disposición de las fibrilaciones que Dios necesitó/ desde entonces la oscuridad es mi estigma/ desde entonces mi madre enciende velitas / y aunque muchos piensen que es para Dios/ yo sé que son para alumbrarme el camino
LAS MANOS DE DURERO
I
dicen que frente a la Puerta de Brandeburgo han cortado la hierba para que nada nuevo crezca (al menos nada natural) mientras se levantan bloques tras bloques frente a las miradas de los transeúntes/ y así las manos de Albrecht siembran una semilla en la pequeña zanja que han abierto y poco a poco dentro del muro brotan flores que rasgarán el cemento/ las manos que levantaron la pared son las manos que la derribarán dijo la profecía/ en noviembre de 1989 las manos de la familia Durero tomaron pico y pala y arremetieron contra el muro/ (de un lado y del otro habían hermanos) aquel día de invierno lo primero que hicieron los hombres y mujeres cuando se encontraron fue tomarse de las manos/ pintar las manos dice mi profesor de Historia del Arte es lo más difícil
II
cuando mi profesor de Historia del Arte habló de Durero
— el pintor más importante del Renacimiento Alemán —
ya yo había escuchado su nombre día tras día
cuando la familia se reunía a la hora de la cena
y mi padre justificaba el vacío sobre la mesa
con una breve oración: esto está Durero
AMONIACO
I
él como buen sommelier le pide que beba vino/ ella quiere hablar del Muro de Berlín (de los escombros lo que en realidad queda) y de si sus sueños de niñez también se desplomarán/ es 1990 y dos estudiantes de preuniversitario se encierran en un cuarto a estudiar/ afuera el aire quema/ él advierte primero el peligro/ ella para entonces ya estaba convencida de que un pueblo en paz es un pueblo sin historia/ ambos se tumban en el suelo/ él extiende un pañuelo húmedo sobre su boca/ ella piensa en la segunda batalla de Ypres/ están seguros de que si el materialismo histórico y Carlos Marx no se equivocan/ aquello que flota sobre sus cuerpos es una agresión del imperialismo norteamericano
II
esa noche cientos de personas llegaron con ahogos a los centros hospitalarios/ dicen que se les encontró tan apretados que tuvieron que trasladarlos como si fueran uno/ luego de un tema de la Sonora Matancera la radio local relataba los pormayores y los pormenores del descarrilamiento de un tren que transportaba amoniaco
Según explicó recientemente en una entrevista este poemario sigue la estela de su primer libro, Habitantes de Marte, al ser igualmente un viaje, pero no de un punto A hasta un punto B, sino sobre todo hacia uno mismo, en busca de lo que somos, de nuestra real identidad.
En noviembre pasado, un prestigioso jurado integrado por los escritores Damaris Calderón, Carlos Esquivel y Luis Manuel Pérez Boitel, decidió otorgar el premio José Jacinto Milanés al poemario Casa junto a las vías del tren, del joven poeta y narrador matancero.
En sus páginas los lectores encontrarán textos como Submarino, Zapatos y Aullido, que también adelantó con su lectura el escritor durante este Miércoles de Poesía.
El poemario Casa junto a las vías del tren, explicó G. Lleonart, está dividido en tres partes: Habitación junto al mar, Sol en el segundo piso y Casa junto a las vías del tren que da título al libro.
“Los tres nombres de cada una de las partes llevan nombres de cuadros del pintor estadounidense Edward Hopper, y con toda intención, no solo porque soy admirador de la obra artística de Hopper, sino más bien porque lo que te trasmite la mirada de Hopper fue lo que traté de hacer con mi poesía desde esa estética del hiperrealismo. Son poemas que dialogan con el contexto cubano, básicamente siguiendo lo que ha sido la estética de mis dos anteriores libros a partir de la intertextualidad y referentes universales, dialogo con la realidad del cubano y de nuestro país”.
Pablo G Lleonart ha merecido también premios como el Quijote de poesía otorgado por la Universidad de Oriente, en el concurso de minicuentos La cola de la serpiente que convoca la filial de la UNEAC en Matanzas en dos ocasiones y el Eliécer Lazo.
Los Miércoles de Poesía corresponden a un espacio dedicado exclusivamente a la lectura poética, por el cual pasaron todas las voces consagradas de los años 70 del pasado siglo, entre ellos Eliseo Diego, Cintio Vitier, Fina García Marrúz, Roberto Fernández Retamar, Antón Arrufat y otras que visitaban el país o residían momentáneamente como Mario Benedetti y Ernesto Cardenal.