Exposición «Con la sal a cuesta»: La simbología fotográfica de Ernesto Cruz
Las lágrimas devienen símbolo sugerido en la exposición “Con la sal a cuesta”, del artista del lente, Ernesto Cruz Hernández, exhibida en el Museo de Bomberos. «Enrique Estrada», en la Plaza de la Vigía, dentro de la convocatoria del proyecto “Ríos Intermitentes”.
Son nueve imágenes que rebasan lo estético para convertirse en expresión testimonial de una época, al documentar a los hombres integrantes de la Brigada contra Incendios, Salvamento y Rescate, de Matanzas, en la segunda década del siglo XXI.
Colectivo que enfrentó junto a otros heroicos combatientes, el terrible siniestro de la Base de Supertanqueros, en agosto del 2022, el cual conmocionó al país y al mundo durante nueve días, igual a la cantidad de fotos representadas.
Conversando con Cruz Hernández, laureado en diversos certámenes, entre estos el VIII FotoNaratón Iberoamericano 2023 y conocido por su trabajo como fotógrafo titular del teatro Sauto, profundizamos en las motivaciones de esta muestra:
“Quise acercarme a los rostros, a las almas de quienes realizan esta labor en nuestra ciudad. Fue una experiencia maravillosa, yo iba con una pretensión que fue superada con creces, al hacer suyo el proyecto.
“Mi intención fue llevar la idea al plano de su trabajo y la vibra quedó bien marcada. Las sigo viendo y me impresionan, por las expresiones faciales y corporales, plasmadas en las imágenes”.
Las fotos se presentan en conjuntos: “Quería incluir la mayor cantidad de personas, pues era imposible que todos los participantes en la extinción del incendio estuvieran, por tanto hicimos una representación de aquellos combatientes y rescatistas”.
Ernesto señala que trabajó en el concepto de familia, que prevalece en este grupo de excepcionales ciudadanos, caracterizados por su altruismo y entrega al cumplimiento del deber de proteger a sus semejantes y de preservar en lo posible, lo que se ha construido con tanto esfuerzo.
Sobre la idea que lo llevó a concebir la esencia figurativa de la exposición, reflejada en su título, nos dice:
“Necesitaba de un elemento físico que tuviera que ver con la ciudad, con la idiosincrasia del cubano y lo encontré en la sal. Nuestra urbe está situada alrededor de una preciosa bahía, como coliseo romano, que increíblemente baña de salitre casas, edificios, personas, todo el tiempo.
“También las lágrimas son saladas y han sido muchas las esparcidas; la sal si nos cae en la piel, arde, quema, pero sana; al estudiar sus virtudes hallé que en la Biblia se enaltece su propiedad de purificación a lo largo del avance de la Humanidad.
“Y me inspiré en esa cuerda, que tenía además la exaltación de que el agua de la bahía fue el recurso hídrico para la extinción de ese incendio de inmensas proporciones. Entonces, entretejí estos hechos con el título y el enfoque de la exposición”.
Desde los cuadros caen las lágrimas de recordación y homenaje, como la salada espuma del mar que invade la ciudad, saturada de la emoción y el dolor que provocaron la heroicidad y la pérdida de los combatientes, inolvidables en el corazón de los matanceros y de la nación.
La importante exposición del artista Ernesto Cruz Hernández, titulada “Con la sal a cuesta”, estará abierta al público durante todo el presente mes, en el emblemático Cuartel de Bomberos, edificado en el siglo XIX, para después insertarse en las exhibiciones previstas a finales de año durante el desarrollo del proyecto Ríos Intermitentes, en la Atenas de Cuba.
